Pensá en la última vez que visitaste una tienda online, ¿te acordás cómo era? Seguro que no, pero de lo que sí te acordas es cómo te hizo sentir: ¿Emocionado? ¿Confiado? ¿Feliz? O te sentiste confundido o frustrado porque era difícil navegar.

4 reglas básicas para el diseño de tu página web.

El diseño para el comercio online es algo más que el aspecto de una página web, ya que toma en cuenta la forma en que realmente funciona un sitio, el flujo entre una página y otra, cómo se cuenta una historia y el estado de ánimo que produce.

Las tendencias de diseño van y vienen, pero hay cuatro elementos visuales fundamentales que no pasan de moda para crear un sitio de comercio online efectivo.

Las fotos de tus productos son un factor clave para la interacción, conversión y retención de tu tienda.

La Confianza: Cuando alguien visita tu tienda por primera vez, es posible que no sepa nada sobre tu marca, la calidad de tus productos o tu compromiso para hacer feliz al cliente. Las ofertas pueden atraer su atención, pero tendrá que confiar en ti antes de realizar una compra.

Información de contacto: No hay nada que espante más clientes potenciales que una página web sin información de contacto. Incluye un correo electrónico y, si es posible, un número de teléfono y una dirección física de correo. Este tipo de información, junto con una página “Quienes somos”, ayuda a los clientes potenciales a sentir que están comprándole a una persona real.

Una política de devolución: Una política de devolución no solo hace que sea más fácil para las personas devolver los productos que no los satisficieron, sino que también aumenta las ventas al infundir en el cliente un sentimiento de seguridad y confianza de que puede devolver un artículo si es necesario.

El atractivo visual: La percepción lo es todo al vender tus productos online. Las personas adquieren su primera impresión de tu sitio en tan solo 50 milisegundos. Con tu tienda, el secreto para hacer que las impresiones cuenten reside principalmente en la calidad de tus imágenes.